Solomillo Wellington
Esta receta no es precisamente ligerita, pero está buenísima. Es muy de fiesta y vistosa sobre todo si lo haces de una pieza aunque me gusta menos porque se rompe mucho al cortarlo. Lo mejor: lo puedes preparar de antemano y tenerlo en la nevera para hornearlo en el último momento. Mi horno tiene función aire y pude meter dos bandejas con 8 solomillos individuales. Una buena idea para las fiestas que vienen. A disfrutar.
Para 2
INGREDIENTES
2 solomillos de añojo
2 chalotas
2 champiñones
2 cta paté
2 cta colmada mostaza inglesa
1 cta salsa Worcestershire
50 ml nata
1 nuez de mantequilla
1 placa de hojaldre
1 yema de huevo
Aceite
Sal y pimienta
ELABORACIÓN
Sellamos los solomillos salpimentados en una sartén muy caliente. Deben de quedar muy crudos ya que se terminan de hacer en el horno. Con la mantequilla y un poco de aceite pochamos las chalotas picadas finas. Cuando empiecen a dorar incorporamos los champiñones también cortados finos. Esperamos a que expulsen el agua y añadimos la salsa Perrins y la nata. Cocemos lento hasta que se haga una masita más bien seca.
Precalentamos el horno a 200º
Para el montaje cortamos la placa de hojaldre en 4 rectángulos. En dos de ellos untamos el paté en el centro y ponemos encima las setas sin llegar a los bordes. Untamos la mostaza en un lado de la carne y lo ponemos boca abajo encima de los champiñones. Tapamos con el resto del hojaldre sellando los extremos con huevo mezclado con unas gotas de agua. Damos la vuelta a los paquetes y pincelamos por encima con el resto de huevo para que nos quede brillante. Hacemos un agujero en el centro para que salga el vapor y metemos en el horno 10 minutos. Bajamos la temperatura a 180º y dejamos otros 10 minutos o hasta que se dore el hojaldre. Dejar reposar 5 minutos antes de servir.