Galletas extra blanditas avena y arandanos
Investigando por la web descubrí que uno de los trucos para que las galletas sean más blanditas, que es como me gustan y sin que sean bizcochos, es emplear entre los ingredientes leche en polvo. Y funciona. A disfrutar.
Para 1 ½ docenas
INGREDIENTES
125 g harina
125 g copos de avena
½ cta levadura en polvo
½ cta bicarbonato
¼ cta sal
2 cda leche en polvo (20g)
1 cda Maicena (10g)
1 cta canela
1 clavo molido
¼ cta nuez moscada
¼ cta jengibre molido
2 vueltas de molinillo de pimienta negra
175 g mantequilla
50 g azúcar blanquilla
125 g azúcar moreno
1 huevo
1 cta extracto de vainilla
75 g arándanos (cranberries) secos
ELABORACIÓN
Precalentamos el horno a 190º
En un recipiente hondo mezclamos los ingredientes secos: Harina, avena, leche en polvo, Maicena, levadura y bicarbonato. En un mortero molemos el clavo con ayuda de la sal y lo añadimos al bol junto con el resto de especias y mezclamos. En otro recipiente batimos la mantequilla a temperatura ambiente con los azucares hasta que blanquee y suba un poco. Añadimos el huevo y la vainilla seguimos batiendo con ganas. Por último vamos incorporando los ingredientes secos justo hasta que se incorporen y finalmente los arándanos un poco cortados si son muy grandes. Enfriar la masa tapada al menos media hora.
Con una cuchara o un sacabolas de helado hacemos bolas de masa y las disponemos en una bandeja con papel de hornear. Deben quedar separadas por lo menos 5 centímetros entre ellas, por lo que se deben hacer entre 2 o 3 hornadas. Si el horno tiene aire se pueden hacer en varias bandejas a la vez bajando la temperatura 10º. Conviene guardar la masa en la nevera para que no pierda frío entre hornadas. Hornear de 13 a 15 minutos o hasta que se doren ligeramente los bordes y dejar enfriar 5 minutos. Terminar de enfriar sobre una rejilla. Hay que tener cuidado y manejarlas con una espátula porque salen muy blandas. Entre hornada y hornada enfriar la bandeja del horno.