Helado de ruibarbo
Vamos a ponerle sabor a la base para helado que publiqué el otro día. En este caso utilicé ruibarbo que tenía congelado salió a las mil maravillas. Cuando acabe con este experimentaré con otros sabores o con frutas de temporada que estén a muy buen precio. A disfrutar.
INGREDIENTES:
Para la base:
430 ml leche entera
200 ml nata
4 cta Maizena
50 g queso crema
100 g azúcar
2 cda (50 g) azúcar invertido
¼ cta sal
1 cta extracto de vainilla
Para el sabor:
500 g ruibarbo
50 ml vino tinto joven
100g azúcar
½ limón
ELABORACIÓN:
En un cazo ponemos a cocer el ruibarbo cortado en trozos de 2 o 3 centímetros con el vino el azúcar y el zumo del limón. Cuando se ablande y espese trituramos con la batidora y reservamos.
Disolvemos la Maizena en un poco de la leche y reservamos. Ponemos a calentar la leche y la nata junto con los azucares y la sal en un cazo hasta que se disuelva todo. Cuando hierva retiramos del fuego e incorporamos la maicena bien desecha. Volvemos a poner en el fuego y cuando vuelva a hervir cocemos unos minutos hasta que espese bien y se cocine. En un bol batimos el queso con unas varillas hasta que esté uniforme. Mezclamos el extracto de vainilla y vamos incorporando la preparación del cazo.
Añadimos el puré de ruibarbo y movemos hasta que esté todo bien incorporado. Enfriamos metiendo el bol en otro más grande con agua y hielo, moviendo de vez en cuando, o tapamos con film a piel (pegado a la masa completamente) y metemos en la nevera una vez templado.
Mantecamos en la heladera siguiendo las instrucciones del fabricante. Suele ser meter el recipiente en el congelador al menos 12 horas y luego ir incorporando el helado poco a poco mientras se mueven las aspas. Tarda alrededor de 30 minutos. Cambiar de recipiente y meter en el congelador al menos 4 horas. Si no tenemos heladera meter en el congelador y remover la mezcla cada media hora hasta que esté congelado.